Agustinos de Alicante se enfrenta a su partido más complicado en lo que va de temporada. El próximo sábado a las 20h se desplaza a Carrús para medirse al segundo mejor equipo de la liga, el CBM Elche Vulcanizados Alberola, en un derbi que promete ser de los más emocionantes de las últimas temporadas. 

El CBM Agustinos de Alicante quiere certificar su liderato en un derbi de altos vuelos y gran expectación

Los hombres de Óscar Gutiérrez lideran la clasificación del grupo E de Primera Nacional desde su victoria en la primera vuelta (30-28) ante el conjunto ilicitano. Después de quince jornadas en primera posición, los alicantinos aventajan en tres puntos a los franjiverdes y llegan a este clásico con la mente puesta en certificar su liderato a falta de cuatro jornadas para la conclusión de la liga regular.

Un triunfo en el parqué de Carrús situaría a los colegiales con cinco puntos de renta sobre el Elche, la clasificación para la fase de ascenso casi en el bolsillo -ocho puntos sobre el tercero- y muy cerca de obtener el título de campeón.

Pero si hay un equipo que necesita la victoria en el derbi ese es el CBM Elche. El conjunto dirigido por José Luis Navarro sabe que debe ganar al líder si no quiere que el final de temporada se complique, ya que el tercer clasificado, el Viscoconfort Maristas de Algemesí, podría recortar distancias esta jornada y pelear hasta el final por la segunda plaza que da acceso a la fase. Elche pasó apuros en su último desplazamiento ante Florida Universitaria -ganó por la mínima 28-29 con un gol en los últimos segundos- pero todo hace indicar que saldrá con todo su arsenal ofensivo para vencer al líder.

Agustinos y Elche son firmes candidatos al ascenso a División de Honor Plata. Ambas escuadras suman 21 victorias en 24 jornadas lo que demuestra la espectacular temporada que están realizando. Para este trascendental partido se espera un gran ambiente en Carrús, con lleno absoluto, en lo que será el derbi más interesante de las últimas temporadas. Todo aficionado al balonmano debería acercarse a la cancha ilicitana para ver jugar a los dos mejores equipos de Primera Nacional.